La comisaría de Villa Bonita alertó sobre el grave estado del puente
Sábado 19 de abril de 2014
En el libro de guardia de la Comisaría de Villa Bonita, municipio de Campo Ramón, quedó asentando que el puente del arroyo Acaraguá presentaba un importante deterioro y era un riesgo concreto para quienes transitaban sobre esa estructura.
La situación fue alertada ante la Jefatura de la Unidad Regional II de Policía, que a su vez informó a las autoridades del Ministerio de Gobierno, según confirmaron fuentes de la fuerza.
El epicentro de la tragedia, que se cobró la vida de dos personas, se ubicaba entre las localidades de Villa Bonita y Colonia Acaraguá, municipio de Alba Posse, este último jurisdicción de la Unidad Regional XI de Aristóbulo del Valle.
El arroyo marca el límite entre Campo Ramón y Alba Posse, por lo que cada cabecera del puente debía ser custodiada por efectivos de las respectivas unidades regionales.
“La orden del Gobierno era que cada jurisdicción policial destine un móvil y un efectivo para el control permanente del puente. Del lado de Villa Bonita le corresponde a la Unidad Regional II y del lado de Colonia Acaraguá a la Unidad Regional XI. Pero era todo un tema lidiar con la gente, una tensión constante. Se clausuró una mano y permitían pasar sólo vehículos chicos, y de a uno por vez. Pero el puente temblaba cuando pasaba un coche, era de terror y está todo asentado en los libros de guardia. Tendrían que haber clausurado definitivamente el puente, pero nunca dieron esa orden”, reconocieron desde la fuerza, donde coincidieron además en que a simple viste se notaban corrimientos en la estructura y profundas rajaduras.
El colapso del viaducto ocurrió cuando un colectivo Singer pretendió cruzar con 20 personas a bordo, alrededor de las 16.30 del último domingo. Desde un primer momento los vecinos del lugar calificaron el hecho como “una tragedia anunciada”, ya que hace varios meses alertaban sobre el grado de deterioro que presentaba el paso. Incluso, en diciembre pasado la Dirección Provincial de Vialidad Provincial restringió la circulación.
De todas formas, ante el inicio de la cosecha de tabaco, el miércoles 9 de abril el organismo provincial habilitó el paso en forma temporaria para el transporte de cargas de hasta cinco toneladas, pero manteniendo la restricción total para la circulación del tránsito pesado “por el deterioro que presenta la estructura principal del puente”, indicaron a través de un comunicado.
Ante la tragedia, los habitantes de la zona subrayaron que la Policía controlaba con intermitencias y no se apegó a las directivas de Vialidad, que prohibió la circulación del tránsito pesado. “Permitieron hasta cinco toneladas, pero acá veíamos pasar equipos completos y colectivos. Pasaban camiones con rollos de madera, yerba y hasta cisternas de combustible, y la Policía miraba. Si hubieran hecho bien su trabajo no tendrían que haber dejado pasar al Singer, pero parece que el domingo ni vinieron”, comentó Isolina González., vecina de Acaraguá.
La situación fue alertada ante la Jefatura de la Unidad Regional II de Policía, que a su vez informó a las autoridades del Ministerio de Gobierno, según confirmaron fuentes de la fuerza.
El epicentro de la tragedia, que se cobró la vida de dos personas, se ubicaba entre las localidades de Villa Bonita y Colonia Acaraguá, municipio de Alba Posse, este último jurisdicción de la Unidad Regional XI de Aristóbulo del Valle.
“La orden del Gobierno era que cada jurisdicción policial destine un móvil y un efectivo para el control permanente del puente. Del lado de Villa Bonita le corresponde a la Unidad Regional II y del lado de Colonia Acaraguá a la Unidad Regional XI. Pero era todo un tema lidiar con la gente, una tensión constante. Se clausuró una mano y permitían pasar sólo vehículos chicos, y de a uno por vez. Pero el puente temblaba cuando pasaba un coche, era de terror y está todo asentado en los libros de guardia. Tendrían que haber clausurado definitivamente el puente, pero nunca dieron esa orden”, reconocieron desde la fuerza, donde coincidieron además en que a simple viste se notaban corrimientos en la estructura y profundas rajaduras.
El colapso del viaducto ocurrió cuando un colectivo Singer pretendió cruzar con 20 personas a bordo, alrededor de las 16.30 del último domingo. Desde un primer momento los vecinos del lugar calificaron el hecho como “una tragedia anunciada”, ya que hace varios meses alertaban sobre el grado de deterioro que presentaba el paso. Incluso, en diciembre pasado la Dirección Provincial de Vialidad Provincial restringió la circulación.
De todas formas, ante el inicio de la cosecha de tabaco, el miércoles 9 de abril el organismo provincial habilitó el paso en forma temporaria para el transporte de cargas de hasta cinco toneladas, pero manteniendo la restricción total para la circulación del tránsito pesado “por el deterioro que presenta la estructura principal del puente”, indicaron a través de un comunicado.
Ante la tragedia, los habitantes de la zona subrayaron que la Policía controlaba con intermitencias y no se apegó a las directivas de Vialidad, que prohibió la circulación del tránsito pesado. “Permitieron hasta cinco toneladas, pero acá veíamos pasar equipos completos y colectivos. Pasaban camiones con rollos de madera, yerba y hasta cisternas de combustible, y la Policía miraba. Si hubieran hecho bien su trabajo no tendrían que haber dejado pasar al Singer, pero parece que el domingo ni vinieron”, comentó Isolina González., vecina de Acaraguá.
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